jueves, 23 de septiembre de 2010

Samaná

La península de Samaná es el lugar obligatorio si se quiere apreciar la belleza natural. Ubicada al norte de la isla, está llena de envidiables paisajes. 




El Salto del Limón es una cascada de unos 40 metros de altura.
Los alrededores de la cascada están minados de la cultura propia dominicana, con pequeños pueblos de casitas pintorescas y la vegetación compuesta por árboles nativos como el Juan Primero, la Cigua Blanca y el Higüero.











Cayo Levantado, una isla de apenas 1 km cuadrado de extensión, pero ¡qué km cuadrado!
Es un mini paraíso.
Puede que la conozcan como"Isla Bacardi", por las palmeras que la cubren y que aparecen en publicidades del ron Bacardi.












¡Sí!
Ballenas, ballenotas...
Las ballenas jorobadas visitan la isla cada año, y por alguna razón les gusta hospedarse en las costas de Samaná.
Un espectáculo imperdible.













Los puentes de Samaná: ingeniería, arquitectura y naturaleza hacen un trío de ensueño.









Las Terrenas es un pequeño poblado característico por sus playas paradisíacas y virginales.
Es un lugar perfecto para abandonarse y disfrutar de la belleza caribeña.

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